¡Llegan refuerzos a los ejércitos de bestias híbridas de Mindbug! Amplía tus mazos de juego con 10 nuevas cartas que volverán aún más locas tus partidas. Esta expansión se puede añadir al juego base y a la expansión ‘Primer contacto nuevas criaturas’. Obra del legendario Richard Garfield, creador entre otros muchos juegos del célebre Magic: The Gathering o King ofTokyo, Mindbug es un juego de cartas para dos jugadores, a partir de 8 años, que permite partidas de entre 15 y 25 minutos.

Entre las 10 nuevas cartas de esta expansión para Mindbug encontramos al Caracoltapulta, que sacrifica a una unidad aliada para derrotar a un enemigo. El parásito de Mindbug, que se cobra un punto de vida del oponente antes de que juegue un Mindbug. El Ratomante, que permite volver a activar cartas de la pila de descarte. La Cabra Saltamontesa, que añade frenesí a las cartas aliadas. El Puercohete, que una vez fuera de juego, derrota a su vez a todas las criaturas enemigas. La Babosanauta, que tiene poderes y habilidades variables según su uso. Chuck, que te pide tirar un dado y según el resultado te permite derrotar criaturas enemigas. El Jazziperro, que te ayuda a tomar el control de criaturas enemigas con su música. El Dagón guacamayo, que te permite intercambiar la mano con la del oponente. Y por último el poderoso Unigón (medio unicornio, medio dragón) que te garantiza la victoria si no tienes cartas en la mano.

Y por si todavía no conoces Mindbug, aquí tienes un resumen: en su turno, los jugadores podrán hacer una de las siguientes acciones: jugar una carta o bien atacar con una criatura. Si optan por la primera opción, deberán bajar una de las cartas de la mano a la zona de juego. A continuación, el rival deberá decidir si usa uno de sus Mindbug. En el caso de que decida hacerlo, tomará el control de la criatura y resolverá sus efectos como si la acabase de jugar desde su mano. A cambio, el jugador activo que ha perdido el control de su carta puede volver a jugar un turno. Por otro lado, si el jugador decide atacar, deberá elegir una de las cartas de la zona de juego para luchar. El oponente deberá seleccionar una de sus criaturas para bloquear el golpe o perder una vida. Si se enfrentan dos monstruos, ganará el que tenga el valor de poder más alto. Y si uno de los jugadores pierde sus 3 puntos de vida… ¡La partida termina!

Las cartas que forman el juego tienen habilidades distintas que se adaptan a infinitas estrategias. El frenesí permite a un monstruo atacar dos veces, el sigilo hace que solo otras criaturas sigilosas le puedan bloquear, los cazadores pueden atacar a cartas del oponente… En una sola partida ambos jugadores solo usan 20 cartas (10 cada uno), con lo que siempre quedarán criaturas fuera y, por tanto, las combinaciones de monstruos serán únicas y aleatorias en cada duelo.